Cinco años antes de la ley de creación de Villa de Ceballos (07 de mayo de 1862) el presidente Gabriel Pereira -preocupado por la influencia norteña y el escaso control soberano sobre el norte del río Negro- alertaba al Parlamento: “Los departamentos fronterizos con el Brasil están en su mayor parte ocupados por hacendados brasileños”.
En 1862 el presidente Bernardo Prudencio Berro firmó la ley de creación de la Villa de Ceballos; luego, el 26 de junio de 1867 se decretó la autorización para la creación del Pueblo Rivera, en homenaje al Coronel Bernabé Rivera, donde el 1º de octubre de 1884 se transformó en el departamento de Rivera.
La fundación de Villa de Ceballos respondió a la intención del gobierno uruguayo de crear una barrera a la influencia brasileña, que imponía en el norte del río Negro su idioma, sus costumbres y su poder.
El diputado García Sienra dijo en 1862, durante la discusión de la ley que creó Villa de Ceballos: “No encuentro otro camino para salvar nuestra independencia que establecer colonias en la frontera, cueste lo que cueste”.
El lugar escogido para su asentamiento fue las Puntas del Cuñapirú, un territorio que en los tratados pertenecía a Uruguay, pero en los hechos a Brasil; sitio de pasaje de contrabandistas de ganado y faeneros, cercano a la villa brasileña de Santa Ana do Livramento. El nombre propuesto recordaba al Gobernador de Madrid y Primer Virrey del Rio de la Plata, Pedro de Ceballos, a quien en el año de 1777, el Rey de España, Carlos III, le adjudicó la misión de combatir y expulsar a los portugueses de Colonia del Sacramento y de la Banda Oriental.
Los Brasileños sostenían que el territorio al norte del río Negro les pertenecía porque “se hablaba portugués, se permitía la esclavitud y las costumbres eran portuguesas”. Al fundarse la Villa, los hacendados brasileños vieron como una falta de respeto cobrarles impuestos y hacerlos pasar por una aduana. La zona era un punto fronterizo estratégico, metido entre cerros y serranías.
En el momento de creación de Villa de Ceballos, la población contigua del lado brasileño, Santana do Livramento ya tenía diez mil (10.000) habitantes.
Villa de Ceballos fue fundada a los pies del Cerro del Marco.